Al igual que otros países latinoamericanos, la República Dominicana tiene la tradición de consumir alimentos especiales durante la Semana Santa.
La mayoría católica prefiere pescados y mariscos en este período en lugar de carne.
La comida criolla tiene influencia europea y africana, así como de los inmigrantes de las antillas menores (cocolos), de ahí el uso del coco para muchos platos.
Las especialidades culinarias del país varían según las regiones, pero ingredientes principales que se emplean son los mismos: arroz, los frijoles, los víveres y vegetales, pescados y mariscos.
Platos variados a base de atún, bacalao y otros pescados son preparados en los hogares criollos, así como ensalada de papas, locrio de arenque o bacalao, mezcla de arroz cocinado con dichos pescados.
En el Sur del país acostumbran a elaborar Chacá, un postre a base de maíz , leche, azúcar y especias.
Otros dulces tradicionales son los buñuelos, el arroz con leche, y los de frutas como lechoza, naranja y cajuil.
Los dominicanos gustan compartir estos postres con familiares, vecinos y amigos, razón que motiva a preparar estos platos en grandes cantidades para llevar a sus allegados. Una bonita costumbre que en ocasiones causa gracia, ya que visitar a un amigo o vecino significa que si no te comes el dulce o un vaso de habichelas con dulce, tendrás que llevar a casa un frasco con el apetitoso dulce.
Sin dudas las “Habichuelas con Dulce» es el postre más popular en la Semana Mayor. Elaboradas con frijoles rojos, especias como: clavo y la canela, leche, batata , leche de coco rayado y pasas, las habichuelas dulces se sirven frías,, con casabe o galletitas que se elaboran para la ocasión con una cruz en su cara superior.
Por Margarita Brito
Periodista con más de 20 años de experiencia en radio, televisión y prensa escrita. Esposa, madre y abuela. Escribo porque me gusta y porque nada me es ajeno.