Santo Domingo.- El Museo del Hombre Dominicano en coordinación con la embajada de la República Bolivariana de Venezuela, inauguró la exposición “Iwariwe: el dueño del fuego”, la cual forma parte de un proyecto que muestra las tradiciones de la comunidad indígena Yanomami de Poripori, en el estado venezolano de Amazonas.
El evento fue inaugurado con las palabras de bienvenida del director del Museo del Hombre, el arquitecto Cristian Martínez, afirmando que el fin de esta importante iniciativa es recopilar y presentar las tradiciones de la cultura Yanomami, con la realización de papel artesanal y libros producidos con fibra y materiales propios de la región, con el propósito de preservar los ritos de esta cultura.
Esta inauguración, también contó con la presencia del Ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez y con los embajadores de Venezuela Alberto Castellar y de Ecuador Carlos López.
Por su parte el diplomático Venezolano Alberto Castellar, dijo durante su discurso que esta exposición tiene un gran significado, debido a que esta actividad se esta realizando en el marco de la Jornada Mundial de Solidaridad de Venezuela “Por Aquí Pasó Chávez”, que reconoce y le da valor a la cultura indígena. “Yo creo que esta exposición de alguna forma es un reconocimiento a los indígenas de América Latina y el Caribe, a todos los que han resistido la lucha, la batalla y que todavía siguen en pie”. Afirmó Castellar.
El artista indígena Yanomami Sheroanawe, que ha recorrido países como Estados Unidos y Puerto Rico, mostrando esta exhibición, dijo en su lengua de origen y en español, sentirse muy complacido de estar en el país y poder compartir con el público sus costumbres y el modo de vida de su comunidad en las Amazonas.
Esta exposición, que estará exhibiéndose hasta el próximo 5 de marzo, muestra una serie de objetos originales que representan los elementos que definen a los Yanomami, entre los que se encuentran; utensilios para cocinar y comer, atuendos femeninos y masculinos, abanicos, el libro el dueño del fuego, hamacas, un objeto llamado el palo del espíritu, que utilizan para atraer los espíritus y una escultura tejida a base de hojas de plátanos.