El asesinato del adolescente Fernely Carrión, de 16 años de edad, a manos del el cura católico Ervin Taveras Durán, conmociona a los dominicanos, un hecho vergonzoso que deja sin palabras y recuerda los casos de abusos sexuales a menores del nuncio Josep Wesolowski.
Supuestamente el sacerdote estaba celoso del joven, de quien habría abusado desde los 10 años, habría tenido un ataque de celos, según el padre de la víctima, Freddy Carrrión.
Lo cierto es que este crimen es una muestra de que como decía mi abuela «el enemigo malo», por no decir el nombre del maligno, anda suelto. Más que un ataque de celos este sacerdote parece haber estado poseído por el mal.
Y que triunfo para el demonio! Tal como fue el caso del nuncio apostólico Joseph Wesolowski.
Durante su vida en la tierra Jesucristo liberó a muchos endemoniados, pero hoy nadie lo hace y menos cuando los encargados de hacerlo cometen hechos tan deleznables, en un mundo donde la corrupción y malignidad campea.
Pedir a Dios protección que nos libre de la violencia, de las tentaciones de hacer daño a otros, educar en valores a nuestros hijose hijas, no aceptar que lleven dinero ni regalos como caros celulares o ropas sin investigar de dónde salieron y por qué los tienen.
Joseph Wesolowski, el nuncio católico de su Santidad hacía muchos regalos a niños que vivían en las calles, para abusar de estos. Casos así se repiten, los padres, las madres deben estar atentos y saber con quién o quienes están sus vástagos y no confiar en nadie.
Wesolowski fue destituido de su cargo a finales de agosto de 2013, luego de que el arzobispo de Santo Domingo, el cardenal Nicolás López Rodriguez, le informara al papa Francisco sobra las acusaciones de pederastia que recaían sobre él.
El caso fue destapado originalmente en un programa de televisión dirigido por la periodista investigativa dominicana Nuria Piera.
Allí se señaló que Wesolowksy supuestamente pagaba por mantener relaciones sexuales con menores.
Igualmente, un diácono, ex colaborador de Wesolowsky, declaró que le procuraba niños para que mantuviera con ellos relaciones sexuales.
Algunas de las víctimas de Wesolowski desconocían su verdadera identidad, le conocían como «El italiano» por su acento al hablar español.
Wesolowski , quien fue hallado muerto el 28 de agosto de 2015, imputado por posesión de pornografía y abuso sexual de menores, murió en su domicilio, a los 67 años, por alegadas causas naturales, según informó la Santa Sede.
Luego de ser suspendido de su cargo, fue enviado a Roma por el Vaticano en una decisión que provocó críticas ya que el ex nuncio enfrentaba posibles solicitudes de extradición tanto en República Dominicana como en su natal Polonia.
El 27 de junio de 2015 la Santa Sede anunció su expulsión del sacerdocio tras un proceso canónico instruido por la Congregación de la Doctrina de la Fe.
Sin embargo, en los meses previos se cuestionó la aparente libertad que tenía el exnuncio a su regreso a Europa, a pesar de los graves señalamientos en su contra.
«Para mí fue una sorpresa ver a Wesolowski pasearse por la Via della Scrofa en Roma. El silencio de la Iglesia ha herido al pueblo de Dios», señaló el 23 de junio de ese año en su cuenta de twiter el obispo dominicano Víctor Masalles.
A comienzos de 2016 Naciones Unidas acusó al Vaticano de «sistemáticamente» adoptar políticas que permitían el abuso sexual de decenas de miles de menores por sacerdotes.
El embajador del Vaticano Silvano Tomasi, en comparecencia ante el Comité de la ONU contra la Tortura, insistió en que «no hay clima de impunidad sino un total compromiso para limpiar la casa» y evitar más abusos.
En su declaración Tomasi aportó estadísticas detalladas de las medidas disciplinarias adoptadas contra curas acusados de abusar a menores, apuntando que 848 fueron expulsados del sacerdocio y otros 2.572 recibieron sanciones menores en la última década.
Caso del monaguillo
“Él, el sacerdote le vivía dando dinero a él. Se llenó de celos porque el hijo mío subió fotos de la novia a Facebook. Él lo mandó a buscar con engaños”, expresó Carrión, progenitor de Fernely, quien se encontraba desaparecido de Villa Mella, siendo encontrado su cadáver en Los Mina con signos de violencia.
Fernely Carrión, quien era monaguillo en la parroquia Santa Cecilia en Hainamosa en Santo Domingo Este, fue asesinado a martillazos y puñaladas y luego su cadáver arrojado a una zona de Monte Plata según relataron sus tíos.
El religioso identificado como “Padre Ervin” permanece detenido en la Policía Nacional y contra él la familia presentó