Santo Domingo.’ La alfombra roja de los Premios Soberano no llenó las expectativas de mucha gente que esperaba como en otras que ediciones, que el traje de algún famoso provocara expresiones como waooo! que vestido!!, pero no fue así, muchos eran parecidos, aunque no feos.´Mucha gente comentó le faltó la chispa de otros años. Sòlo mucho brillo y escotes al frente y a la espalda, pero nada impresionante.
Y lo cierto es que hubo trajes elegantes pero muchos muy parecidos y algunos hasta parecían clonados. Las redes sociales se llenaron de «memes», bromeando sobre la gala exhibida en la pasarela que es la alfombra de los premios más importantes del arte.
Con escotes pronunciados, mucho brillo y pedrería Yelissa Lora y Ceny Leyva parecían clonadas, en trajes de Giannina Azar. Cabe destacar que no hubo extravagancias que motivaran la risa por lo exagerado.
No sólo los escotes llamaron la atención, sin también las transparencias, una que destacó fue la actual Miss República Dominicana Sal García, quien lució un traje negro con panties blancos, de Luis Domínguez.
Las comunicadoras Dafne Guzmán y Mariasela Alvarez optaron por el verde, la primera de Michel Reynoso y la segunda de Keyther Estevez.
En cambio, la experta en inmigraciónn Yadhira Morel vistió un diseño azul de Leonel Lirio, en este mismo tono vistió Diomaris La Mala, pero de Jorge Diep.
De negro vistieron La Condesa, Massiel Taveras, La Beba, Charityn Goico, en diseño de Jorge Diep hy Miriam Cruz, de Luis Domínguez; mientras Cheddy García lució un vestido rojo a su llegada y luego otro negro, mientras varias damas, entre estas la presentadora Lorena Pierre, vistieron de blanco
Una muy criticada fue «La Diva», Milagros Germán, quien vistió un vestido de muchos vuelos de flecos a media pierna y que fue junto a la cantautora Covi Quintana, una de las pocas que no llevaron traje largo.
Muchos de los hombres lucieron discretos, pero otros como los Hermanos Rosario optaron por las bellas chaquetas estampadas del diseñador Arcadio Díaz.
Otro que lució muy elegante con un traje de Mauricio Alberino, con un hermoso paisaje de su pueblo natal Loma de Cabrera.