ARODNueva York, USA. Con uniforme  de los Yanquis y empapado por la lluvia, Alex Rodríguez  dijo adiós en una precipitada ceremonia que el equipo le preparó este viernes para su adiós del Bronx.

 

“El béisbol tiene una manera peculiar de darte un toquecito en el hombro cuando menos lo esperas para decirte que se acabó. Estoy en paz conmigo”, había dicho Rodríguez horas antes al partido contra los Rays de Tampa Bay, su último con los Yanquis antes que le retiren del roster activo.

Su adiós en el Yankee Stadium, en el mes de agosto, estuvo muy lejos de las elaboradas giras de despedida que la franquicia más valiosa y laureada del béisbol le ofreció a Derek Jeter y Mariano Rivera, mitos de la organización que se retiraron en el último lustro.

Con un promedio al bate por debajo de .200 y necesitado de cuatro jonrones para alcanzar el exclusivo club de los 700, el toletero de 41 años de edad —odiado y amado por igual— pudo al menos tener la satisfacción de un último juego en casa que contó con la presencia de su madre y dos hijas.

El legendario jonronero yanqui Reggie Jackson se encargó de acompañar a Lourdes Navarro, la madre de A-Rod. El panameño Rivera recibió tal vez la ovación más fuerte de la noche al ingresar al terreno junto a las hijas de Rodríguez, Natasha y Elle.

Cuando las gotas de lluvia arreciaron, al filo de las 7 de la noche, el acto adquirió tintes surreales. Todos se apuraban para cumplir con lo previsto, incluyendo la entrega de una almohadilla al número 13.

De acuerdo a diversos medios de prensa,  los Yanquis no despedían a Rodríguez con todos los honores. Lo estaban exiliando, por más que le estaban asignando hasta fin de año las funciones de asesor e instructor. Era su final en Nueva York dentro de una controversial trayectoria que incluyó una larga suspensión por dopaje, demandas y un campeonato de la Serie Mundial.

Por Margarita Brito

Periodista con más de 20 años de experiencia en radio, televisión y prensa escrita. Esposa, madre y abuela. Escribo porque me gusta y porque nada me es ajeno.

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