El italiano Mauro Semeghini Ambrogyo, de 62 años, quien tiene cinco preso en la cárcel de Corrección y Rehabilitación Najayo-Hombres, en San Cristóbal, pidió al presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Manuel María Mercedes, que interceda ante la embajada de Italia para que le ayude a costear los medicamentos por padecer varias enfermedades que le mantienen al borde de la muerte.
El extranjero, quien recientemente realizó una huelga de hambre en la clínica del doctor Antonio Cruz Jiminián, en el sector Cristo Rey, en el Distrito Nacional, aseguró que hace seis meses que la embajada de Italia no le ayuda económicamente, con lo cual la sede diplomática de su país le estaría negando el derecho que tiene a la asistencia médica.
«La embajada sabe que es mí derecho como italiano recibir ayuda económica para problemas de salud y yo estoy muy enfermo, pero a los representantes de la embajada no les importa qué pase conmigo y ellos pueden ser en parte responsables de mi muerte», indicó Semeghini Ambrogyo.
Reveló que adjunto de los problemas de presión y de glicemia se ha tenido que inyectar «hidrocortizona» para evitar un paro respiratorio, y que a todo esto se le agrega una masa tumoral en la garganta. «Gracias al doctor Cruz Jiminián no he muerto porque la embajada de Italia no quiere ayudarme, y por eso pido la urgente intervención del señor Manuel María Mercedes para que por favor interceda ante esta situación» dijo.
«Gracias a Dios que en la Clínica Cruz Jiminián me estabilizaron la presión y la glicemia y ya puedo mover el lado de mi cuerpo que tenía paralizado, pero si no recibo ayuda urgente de la embajada de Italia no creo resistir mucho tiempo», indicó Semeghini Ambrogyo.