El ícono del merengue, Johnnie Ventura adirmó que el merengue se quedó sin padrino y que el problema del ritmo dominicano está en la difusión y en la falta de empresas que lo apoyen.
“El merengue era la música puntera en el momento que la piratería se acentuó, pero el golpe fue tan fuerte que sacó prácticamente a los disqueros que se dedicaban a trabajarlo”, señaló Ventura.
Manifestó que están gestando una empresa que pueda sustentar el género y hablando con personas con capacidad de inversión para retomar un ritmo, que considera no tiene ninguna dificultad. «Necesitamos personas, empresas, que se ocupen de nuestra identidad musical, desde el punto de vista de la difusión», añadió.
“Uno se da cuenta de que en las actividades donde participa un merenguero reputado la gente baila su música con mucho entusiasmo”, expresó Ventura.
Dijo que un ritmo no tumba otro y que el merengue siempre ha convivido con otros.
Sostuvo que a lo largo de su carrera ha tenido que luchar con música que se pone de moda y en algunos momentos «tuvimos que incursionar en ella para poder mantenernos, pero el merengue no es una cosa que se pueda borrar, es la música de la patria, nace justamente en el momento que nos dimos una nación libre y soberana, que se toca por primera vez”.
Sobre el decreto del Poder Ejecutivo que prohíbe las fiestas hasta el 31 de diciembre próximo en las instituciones gubernamentale dijo que “todo lo que impida gozar y bailar abiertamente a la gente afecta a quienes viven del entretenimiento.
Ventura invitó al público de la capital y del norte del país a disfrutar de la combinación que hará con El Gran Combo de Puerto Rico en dos conciertos bailables.
“La primera función será la noche del viernes 8 de noviembre en la plaza Sambil de Santo Domingo y la segunda se realizará al día siguiente, sábado 9 en el bulevar del Gran Teatro Cibao en Santiago”.
Para estas dos actividades organizadas por su empresa Johnny Ventura & Asociados, el artista invitó al público a asistir con dos pares de zapatos: “uno para bailar merengue y otro para bailar salsa”.
Ventura manifestó que cuando ha querido retirarse de la música, no lo han dejado. “Una vez disolvimos la orquesta y cerramos la oficina, y aún así, nos encontraban en la casa; por eso decidí volver porque no quería discriminar. Le tocábamos a uno y a otro no, algo que me lo reclamaron. Y ya ves, el viejo sigue en la calle”.