El flechazo, a segunda vista, vale decir, ocurrió en 1980 en una producción para la tapa de la revista Manchete. Pelé hacía una década que era O Rei, ostentando con orgullo sus tres títulos del mundo y con los botines recién colgados después de su experiencia en el Cosmos de Nueva York. En su foja civil, acababa de romper su matrimonio con Rosemeri Choibi, con quien estuvo 16 años y tuvo tres hijos, Kelly Cristina, Edinho y Jennifer.
Xuxa era menor de edad
Xuxa era menor de edad y recién empezaba su camino en el modelaje cuando el destino le puso a Pelé frente a frente. En la producción, el astro posaba de smoking, rodeado de cuatro modelos en trajes dorados. Pero antes que para Xuxa, el astro tuvo ojos para Luíza Brunet. “¿Tenés algún compromiso para esta noche?”, le preguntó a la joven. Recuperada del shock, lo rechazó con estilo pero sin dudas: “Sí, voy a prepararle la cena a mi marido”, le respondió.
La versión de Pelé, en una entrevista otorgada al semanario colombiano “Nuevo Estadio” fue diferente. Afirmó que su relación con Xuxa “fue la primera seria que tuve después de mi separación de Rose”, y se refirió a ella de una manera algo fría y repudiable, dejando de lado cualquier comentario galante. “Cuando la conocí, ella tenía 15 años, era virgen y tenía un noviecito con el que estaba peleada. Su padre me dio permiso y salimos juntos. A mí no me gustaban las vírgenes así que le dije que resolviera el problema con su noviecito. Después salimos con frecuencia. En ese momento, ella estaba empezando con sus actividades en la TV y quería tener hijos, pero yo tenía tres y venía de separarme de mi esposa, por lo que no coincidimos. Así, la relación se fue enfriando, aunque quedamos muy buenos amigos”.
A los 53 años se casó con psicóloga
Desde entonces, cada uno rehízo su vida a su manera. En 1994, con 53 años, O Rei se casó por segunda vez con la psicóloga y cantante góspel Assiria Seixas (36), con quien estuvo 14 años de matrimonio y dos hijos, los gemelos Josua y Celeste, y en 2016, con 75 años, se casó por tercera vez con la empresaria brasileña de origen japonés Marcia Cibele Aoaki, en ese entonces de 41.
Ella tuvo otro sonado romance con un ídolo deportivo, menos escandaloso pero igual de popular, el multicampeón de Fórmula 1 Ayrton Senna. Luego se casó con el empresario Luciano Szafir, padre de su única hija Sasha, hasta que en enero de 2013 anunció una relación con el actor Junno Andrade. Solo ellos saben cómo recordaron en la intimidad su historia de amor cuyas diferencias hicieron públicas. Lo cierto es que durante seis años fueron el romance del que habló un país acostumbrado a exagerar las grandes pasiones y a dejarse llevar por el corazón.