KINGSTOWN, San Vicente —
La isla de San Vicente se está quedando sin agua debido a la contaminación de sus suministros con ceniza volcánica, y necesitará cientos de millones de dólares para recuperarse de la erupción del volcán La Soufrière, dijeron autoridades.
La explosión del vocán La Soufriere dejó a la isla caribeña sin electricidad y bajo una gran nube de cenizas.
Entre 16.000 y 20.000 habitantes han sido evacuados de la zona norte de la isla, donde se ubica el volcán, y más de 3.000 de ellos están en los más de 80 albergues estatales.
Docenas de personas hacían filas el martes, fuera para recibir agua o para retirar dinero enviado por amigos y parientes del extranjero.
Entre quienes hacían fila se encontraba el oficial retirado de la policía Paul Smart.
“El volcán nos tomó desprevenidos, es muy devastador”, afirmó. “No hay agua, pero sí mucho polvo en nuestra casa. Damos gracias a Dios que estamos vivos, pero necesitamos más ayuda en este momento”.
San Vicente necesitará cientos de millones de dólares para recuperarse de la erupción, declaró el primer ministro Ralph Gonsalves a la estación local NBC Radio, sin dar más detalles.
Agregó que no se han reportado víctimas tras el estallido de la mañana del viernes y “tenemos que tratar de que eso se mantenga así”. Señaló que algunas personas se han rehusado a salir de las comunidades próximas al volcán y les pidió que abandonen la zona.
Las cenizas y el flujo piroclástico han destrozado cosechas y contaminado los depósitos de agua. El ministro de recursos hídricos de la isla, Garth Saunders, indicó que algunas comunidades no han recibido agua todavía.
El primer ministro anunció que algunos pobladores en los albergues necesitan agua y alimentos, y agradeció a las naciones vecinas por enviar suministros como catres, mascarillas, agua embotellada y tanques. El Banco Mundial otorgó un préstamo libre de intereses de 20 millones de dólares como parte de un programa de recuperación de catástrofe.