Tener en la familia un adicto a los juegos de azar a las apuestas, ( ludópata), es un drama que la mayoría de las personas no quisiera vivir.


 Ana Simó

La semana pasada vi en un programa de televisión a la Defensora del Pueblo, Zoila Medina, llorando al confesar ante las cámaras la situación que vive su familia, por uno de sus nietos, jugador compulsivo en los casinos y advertía de que no le prestaran dinero, porque la familia no iba a pagar, ya que el nieto toma hasta US$ 4 mil dólares y más, poniendo de garantía a la familia y que devolvería US9 mil dólares y hasta más.

Esta confesión de esta conocida señora, ex fiscal y actual defensora del pueblo, me llevó a ver el drama que sufren las familias de los adictos al juego.

Pero, ¿ cómo se detecta si un familiar es ludópata ?,   La psicóloga Ana
Simó explica que cuando la persona prioriza el juego por encima de todo incluyendo familia y trabajo, comienza aislarse, su círculo social se reduce y comienza a utilizar mentiras para no ser descubierto, puede que sea un caso de jugador compulsivo.

La especialista del Centro Vida y Familia sostiene que uno de los pasos más difíciles es que la persona acepte la situación, y destaca que lamentablemente la familia por un buen tiempo esconde la situación, justificándolo y hasta pagando sus deudas, lo que acarrea que el deseo de juego se intensifique.

«Lo que lo lleva a darse cuenta es que la familia lo ponga contra la espada y la pared y reconozca que sus actos han traído consecuencias que no solo le han afectado a, sino ha toda la familia», subraya Simó.

Señala que la familia tiene que dejar de pagar deudas, ponerle limites al adicto donde se le diga la opción que tiene que es rehabilitarse pues sino lo hace pierde el apoyo de la familia.

En el caso Medina, la defensora del pueblo dijo que a su nieto le habían internado en diversas clínicas, pero que de todas se ha escapado y sigue jugando. Sobre esta actitud negativa, la especialista precisa que si la persona se escapa de la clínica, significa que no quiere cambio, que entiende que sólo puede lograrlo.

Destaca que existen en el país, unidades donde no le permiten irse hasta que la persona haga su tratamiento tanto
médico como psicoterapéutico.

 Ana Simó, quien es terapeuta familiar y de pareja, sexóloga, experta en duelos y directora del Centro Vida y Familia, señala que ha tenido casos de este tipo que han logrado regenerarse.

«Si en el centro lo hemos tenido, no puedo negarte que no es nada fácil, que requiere mucha ayuda de la familia y de tenacidad de parte del equipo que esta trabajando el caso. Tener buena preparación académica, trabajar con toda la familia y como pasa en muchos casos, buscar el internamiento», enfatizó.

Ludopatía

La adicción patológica a los juegos azar y las apuestas se conoce como ludopatía. Esta adicción consiste en un deseo irreprimible de jugar pese a que la personales consciente de las consecuencias.

El origen etimológico de este término n el latín: ludus, “juego y patia, que puede traducirse como “enfermedad”.

En un sentido técnico, sin embargo, la ludopatía es más que
una adicción, un trastorno en el control de los impulsos, igual que la cleptomanía, que es el robo compulsivo.

Por Margarita Brito

Periodista con más de 20 años de experiencia en radio, televisión y prensa escrita. Esposa, madre y abuela. Escribo porque me gusta y porque nada me es ajeno.

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