Los científicos del Instituto de Agua, Medio Ambiente y Salud de la ONU creen que los excrementos humanos pueden ser un valioso recurso energético, según informó Science News.
Casi 1.000 millones de personas en los países en desarrollo no tienen acceso a aseos. Pero los excrementos no deben perderse, dice la investigación, sino usarse con para producir calor o electricidad en millones de hogares.
Todos estos desechos, de ser recolectados, calentados en hornos a más de 300 grados y formados en briquetas, permitirían producir 8,5 millones de toneladas de combustible, equivalente al carbón, según el reporte.
Además la misma cantidad de residuos permitiría generar metano por valor de 376 millones de dólares, suficiente para electrificar 18 millones de hogares, según los científicos.
La producción de gas a partir de excrementos, dice la investigación, probablemente podría cubrir los gastos de construcción y mantenimiento del sistema en un par de años.
El 19 de noviembre se celebra el Día Mundial del Retrete, un esfuerzo reconocido por las Naciones Unidas que ayuda a promover la salud y la seguridad en los países en desarrollo