El conocido cantautor español Joan Manuel Serrat presentó anoche su “Antología desordenada”, en el anfiteatro Nuryn Sanlley en una noche llena de emociones y recuerdos.
Serrat estableció una complicidad total con los asistentes y hasta con los vendedores a los que compró agua y lo que pareció ser una botellita de whisky, desde que a las 8:35 de la noche subió al escenario, vestido con jeans y camisa azul.
Tal fue la conexión que tras que tras cantar temas como “Niños”, “Para la libertad”, “Pueblo blanco”, “Romance de Curro”, “Mediterráneo” y despedirse, la gente gritaba “otra” por lo que junto a sus músicos retornó y aunque señaló que era natural y gratificante que las cosas acaben, cantó otros dos temas entre estos “Pequeñas cosas” y se despidió, pero el público insistía y tuvo que volver para cantar “Fiesta” con la cual se despidió definitivamente, concluyendo una noche maravillosa, en la que no faltó una dama que le entregó una rosa y otra que le pidió le autografiara un antiguo disco de vinilo.
Canciones sociales, de amor, nuevas y conocidas hicieron disfrutar a un público que no cesó de aplaudir y de pararse a ovacionarlo.
“40 mil niños mueren a diario en el mundo, millones son explotados laboral, sexual, usados en guerra como soldados, usados como mercancía para extraer sus órganos y venderlos, la infantes son los más pobres del mundo”, explicó antes de cantar un tema que se refiere a los menores explotados “Hijo del cerro” y luego una crítica a los políticos: “Algo personal”.
Serrat interpretó temas con los cuales se dió a conocer, en catalán: “Palabras de amor”, del que dijo cantan en bodas, bautizos, divorcios y hasta funerales, lo que no le importa, siempre que no sea él quien esté en la caja, y una canción de cuna que hiciera en homenaje a su madre.
El cantautor bromeo de principio a fin, incluso con el seguridad que estaba al frente, al que preguntó si estaba para cuidarle de tan buena gente y agradeció la presencia de los asistentes por tomar una noche de su vida para compartir junto a él esa gran fiesta.
El artista, que celebra 50 años en la música interpretó temas como “De vez en cuando la vida” y “Cartón de piedra”, entre otras, mientras se secaba el sudor señalando “qué fresquito, qué rico”, pese a que sudaba.
Serrat bromeó indicando que este año se cumplen cien años del estreno de Amor brujo, del nacimiento de famosos como Ingrid Bergman, Sinatra y Pinochet, a quien abucheó la gente, y aunque dijo que se cumplían 500 años de la fundación de la ciudad de La Habana y mil años de Gis Verga, reina de Aragón y esposa de Ramón I, señaló al público ni a él le importaba eso, pero que no encontró nada más en Wikipedia, que no le hizo falta para saber que cumple 50 años en el arte. “Lo que ustedes aplauden es el acto de supervivencia…” Añadió que 50 años es mucho tiempo, pero que pasaron como un suspiro.
Señaló que haber podido hacer lo que le gusta, conocer gente maravillosa y que le paguen, aunque dijo que el dinero no le importa (siempre en plan de relajo) dijo tener gratitud por todos los que hicieron posible , para luego interpretar “Mi niñez”, “Si caminas yo te sigo” y “Porque te quiero a tí”, uno de los más aplaudidos.
Como contraparte, la actuación de Roberto Delgado (Bobby) y su grupo, junto a Carolina Delgado, dejó una grata impresión del público que disfrutó de temas como “Sobrevivir”, “Se me olvidó”, “Ciudadano.com, los cuales dejaron encendida la pista. Llamó la atención que antes de la actuación de Serrat fuera interpretado el Himno Nacional.