Ahí no hay macuteo. Micros y pequeños empresarios están contentos con el presidente Danilo Medina porque su gobierno les ha dado la oportunidad de energizar sus negocios y ganar -por fin- un dinerito. Lo bueno es que se ha hecho con equidad y transparencia. Democráticamente.
Es el caso de fabricantes de muebles de San Cristóbal que se han asociado formando el Clúster del Mueble. Son unos 200 talleres con 5 y hasta 10 empleados cada uno. Se han establecido en el Parque Industrial San Cristóbal (PISAN).
Quince años en la brega, afanando, resistiendo a las inclemencias de la indiferencia gubernamental, víctimas de la asimetría en el acceso al crédito. ¡Por fin!
«Con la Revolución Educativa y con nosotros se está haciendo Patria», explica uno de los tantos ebanistas con los que conversamos.
Hace tiempo debió ocurrir. «Le tocó a Danilo hacerlo», dice Miguel Payano.
Después de andar de la ceca a la meca, cuenta Julio Mateo, lograron registrarse como proveedores del Estado, participar en un concurso público y ganar la fabricación de 5,000 pupitres por más de 9 millones de pesos.
Ahí no hubo macuteo ni favoritismo. Transparencia total.
Están contentos. Miran el futuro con optimismo. Recuperaron la esperanza.