Una ola de críticas ha causado en el país la visita del escritor de origen peruano y Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, quien vacacionó en el país, como acostumbra cada año.
El autor de «La fiesta del chivo», libro que trata de la Era de Trujilloo, fue visto el pasado martes en Librería Cuesta Centro del Libro, de la avenida 27 de Febrero esquina Abraham Lincoln, donde recorrió los módulos y saludó a empleados y personas que le reconocieron.
Según empleados del establecimiento, es costumbre del escritor visitar esa librería cada vez que viene a su residencia en la zona Este de República Dominicana.
En las últimas semanas declaraciones de Vargas Llosa sobre la sentencia 168 del Tribunal Constitucional que establece reglas sobre la nacionalidad dominicana y sobre el Cardenal López Rodríguez han generado reacciones adversas.
Aunque la visita fue breve, el escritor usualmente compra libros para obsequiar a sus amigos y allegados, inclusive algunos de su autoría, lo que realiza varias veces al año.
Hace unas semanas en Madrid, los embajadores de la República Dominicana en España y el Reino Unido, César Medina y Federico Cuello Camilo, reclamaron al diario madrileño “El País” un desagravio por una ilustración que coloca la bandera nazi con la cruz esvática ilustrando un artículo del escritor peruano Mario Vargas Llosa contra el fallo del Tribunal Constitucional.
Explican que el artículo de Vargas Llosa “Los Parias del Caribe”, se refiere en términos degradantes y peyorativos a la República Dominicana, “un país que siempre lo ha acogido de forma generosa y gentil y que lo ha reconocido como figura excelsa de las letras latinoamericanas”.
Los diplomáticos dijeron que la distorsión de la imagen de su país surge de los desafortunados epítetos utilizados por Vargas Llosa sobre la sentencia TC/168/13 promulgada por el Tribunal Constitucional dominicano el pasado 23 de septiembre.