“Miembros del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza (CESFRONT) consiguieron desarticular una red de tráfico y trata de personas en Pedro Corto aunque los dos presuntos cerebros de la operación consiguieron darse a la fuga”, expresa la RFJS en un comunicado de prensa.
Indica la entidad de derechos humanos que la guagua transportaba 90 personas en el interior de la misma, en condiciones de hacinamiento, la mayoría de pie para hacer un trayecto de más de 4 horas y habían conseguido burlar la seguridad fronteriza entre Haití y República Dominicana a cambio del pago de 50,000 pesos a autoridades implicadas que están siendo investigadas por la fiscalía.
Según informaciones obtenidas por los monitores de la Red Fronteriza Jano Siksé de Elías Piña, cada una de las personas que traficada habría pagado siete mil pesos para poder llegar desde su país de origen hasta su destino final.
El tráfico y la trata de personas es un fenómeno que se está expandiendo por la frontera dominico-haitiana, ya que resulta un negocio muy lucrativo para muchas personas. La guagua neutralizada por el CESFRONT en Pedro Corto es un claro ejemplo de ello, por el transporte de los 90 migrantes, el cobrador, el chofer y otras personas que les habilitaron el paso por la frontera se habían ingresado más de 630,000 pesos.
El chofer de la guagua y el cobrador, de demostrarse el delito, se enfrenta a una pena de entre 10 y 15 años de reclusión y multa no menor de 150 ni mayor de 250 salarios mínimos, como autores de un presunto delito de tráfico ilícito de migrantes. A esta pena mencionada se le podrán añadir 5 años más en adicción a la pena principal por ser 90 las personas transportadas y por llevar menores de edad.
Indica la red fronteriza de Comendador que aunque no se pueden ver sus cadenas, muchas personas en la frontera son compradas, vendidas, atrapadas, engañadas y privadas de su libertad por “tratantes de personas”.
En los próximos días el caso será conocido por la fiscalía de San Juan de la Maguana que debería de actuar con todo el peso de la justicia sobre una práctica bastante frecuente en las rutas de transporte de los municipios fronterizos. Del mismo modo, esperamos que se cumplan los arts. 9, 10 párrafo II y el art. 11 párrafo II de la Ley No. 137-03 sobre tráfico ilícito de migrantes y trata de personas, que garantizan la asistencia y protección de las víctimas en cuanto a los derechos que les corresponde por ser víctimas del delito de tráfico ilegal de personas. Recordemos que en la anterior desarticulación de una red de tráfico de personas en Comendador, el 8 de enero de este año, las víctimas, 9 personas, entre ellas un bebe de menos de un año, fueron repatriadas inmediatamente después de su declaración en el juzgado contraviniendo las garantías y derechos estipulados en la ley.
De momento las entidades gubernamentales no han proporcionado la atención física, psicológica y social, así como el asesoramiento e información a todas las personas que actualmente se encuentran en dependencias del CESFRONT en calidad de testigos, por haber sido presuntamente víctimas de un delito de tráfico ilegal de personas, debido a los problemas de jurisdicción para conocer el caso. La única atención recibida hasta el momento por estas personas es la proporcionada por los miembros del CESFRONT, que está siendo ejemplar y muy correcta, y por un representante del consulado haitiano de Barahona.
Saludan acción del CESFRONT desarticuló red tráfico de inmigrantes
