“En una nueva expulsión colectiva de extranjeros, prohibida por el derecho internacional estas 41 personas fueron abandonas a su suerte, sin formulario de registro individualizado, sin memorándum de deportación firmado por el inspector actuante y el deportado y sin la correspondiente notificación al estado de origen para que de las personas expulsadas puedan recibir la atención psicológica y medica que precisen. Todo ello contraviene claramente la ley dominicana de migración (285-04) y su posterior reglamento (631-11), expresa la RFJS, en un comunicado de prensa enviado a los medios de comunicación.
Según la Red Fronteriza Jano Siksé los deportados fueron detenidos en Higuey, y después de una estancia en el Centro de Detención de Haina, el martes 3 y aproximadamente a las 4:00 p.m fueron expulsados hacia Haití.
Indica que entre las personas deportadas se encontraba un padre con un niño de 2 años que tuvieron que vivir todo el proceso de detención, Retención en Haina en condiciones de hacinamiento y por varios días, con mala e insuficiente comida, sin condiciones de salubridad para posteriormente, después de un viaje de más de 4 horas ser abandonados en la frontera a cientos de kilómetros de su lugar de nacimiento.
“Con este caso, la Dirección General de Migración se salta el respeto y garantía a la protección familiar, la Constitución dominicana, la Convención americana de Derechos Humanos y la Convención sobre derechos de los niños, niñas y adolescentes”, explica la organización de derechos humanos.
Sostiene que esta política poco clara y nada transparente, irrespetuosa de los convenios internacionales suscritos por la República Dominicana en materia de derechos humanos y derechos de los migrantes y sus familias, atenta contra la dignidad humana, el derecho a la igualdad, el derecho a las garantías procesales y convierte estas expulsiones en deportaciones indiscriminadas, arbitrarias y discrecionales.
