Odebrecht Santo Domingo

 

El doctor Franklin García Fermín, exrector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), afirmó que el acuerdo entre la Procuraduría General  de la República con la empresa Odebrecht es un monumento a la impunidad, ya que las leyes dominicanas permiten una negociación de la pena y no del delito.

«Las acciones criminales consecuencia  del soborno llevado a cabo a través de la una red compleja y sofisticada para realizar negocios con el Estado Dominicano, los cuales se obtuvieron en base a ilícitos, no pueden ser negociados   para mantener la impunidad, porque eso viola la Constitucion y el Código Procesal Penal», indicó el doctores García Fermín.

Criticó que la Procuraduría General de la República divulgara a través de una nota de prensa que Odebrecht se comprometió al pago de una

indemnización de 184 millones de dólares, sin antes concluir las

investigaciones e indagatorias necesarias para evidenciar los valores que fueron admitidos por concepto de sobornos por funcionarios públicos.

«En el supuesto caso que se cuantifique que los sobornos asciendan a la suma señalada por Odebrecht, a través de las indagatorias del ministerio público, el pago indemnizatorio debe ser homologado por una sentencia de un tribunal, lo cual no sucedió en este caso», afirmo el jurista y político.

El también alto dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), señaló que los ilícitos por los cuales se puede perseguir a la empresa de capital brasileño Odebrecht y los dominicanos que están involucrados, son sobornos y lavado de activo.

El exrector de la UASD, indicó que este acuerdo con Odebrecht viene a

confirmar que la supuesta investigación de parte de la Procuraduria General de la República es un montaje que corresponde a guión elaborado por el Gobierno peledeísta.

Consideró que el mejor ejemplo de ese montaje lo constituye el hecho de que la mayoría de los préstamos para los proyectos

Por Margarita Brito

Periodista con más de 20 años de experiencia en radio, televisión y prensa escrita. Esposa, madre y abuela. Escribo porque me gusta y porque nada me es ajeno.

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