República Dominicana.- La educación online se ha consolidado como una de las herramientas más eficaces para conectar la formación académica con las exigencias reales del mercado laboral. Frente al modelo tradicional, que muchas veces prioriza la teoría por encima de la práctica, las universidades digitales han encontrado la manera de ofrecer programas que combinan certificaciones internacionales, proyectos aplicados y habilidades digitales de alto valor, garantizando una empleabilidad inmediata y competitiva.
En República Dominicana, esta tendencia es cada vez más clara. La matrícula en la educación superior a distancia y semipresencial es una realidad consolidada que atiende a cientos de miles de estudiantes, impulsada por universidades que priorizan la flexibilidad.
Este giro responde a la expansión de internet, que alcanzó una penetración del 76% de la población en 2024, según el Banco Central. El gobierno, a través de la Agenda Digital, se enfoca en que la población adquiera competencias digitales, con el objetivo de elevar el 34.7% de los habitantes de bajos recursos que poseían habilidades básicas y medias.
Además, la empleabilidad marca la diferencia: la inversión en un posgrado está directamente relacionada con la rentabilidad, ya que los profesionales de 25 a 54 años con educación terciaria o superior registran un salario promedio que duplica el ingreso de aquellos con solo nivel medio, lo que subraya el valor de la especialización que ofrece la modalidad online.
Ferran Calatayud Ventura, Executive Director/CEO de BIU University, lo resume de forma clara: “Hoy la creatividad y la capacidad de aprender rápido son más importantes que nunca; la educación online ofrece ese espacio para reinventarse constantemente y mantenerse vigente”.
No obstante, el reto no es menor. Según la Oficina Nacional de Estadística (ONE), persiste una brecha significativa en la conectividad doméstica, esencial para la educación online, el 38.1% de la población en zonas rurales contaba con acceso a internet ilimitado en el hogar en 2022, frente al 55.3% en zonas urbanas, una disparidad que limita el acceso a oportunidades.
Sin embargo, el Ministerio de Educación (MINERD) ha respondido a este desafío, reportando que más de 5,000 centros educativos ya cuentan con acceso a internet de banda ancha y fibra óptica. A pesar de los avances en infraestructura, el desafío clave sigue siendo el desarrollo de las habilidades digitales, formar a docentes, crear contenidos accesibles y garantizar la estabilidad de la conectividad para no dejar a nadie atrás.
En paralelo, según datos del Grupo Banco Mundial, Alrededor del 40% de los empleadores reporta dificultades para llenar vacantes debido a la falta de habilidades técnicas o experiencia. A esto se le suma la baja adopción tecnológica, solo un 10% de los trabajadores dominicanos utiliza intensivamente herramientas digitales y apenas un 13% de los trabajadores dominicanos participan en trabajos gig en línea.
Además, mencionan que en la próxima década 1200 millones de jóvenes accederán al mercado laboral, ante 420 millones de vacantes disponibles. Tanto en República Dominicana como en el mundo. Para Ferran la clave está en que la educación online conecta de forma directa al estudiante con las demandas emergentes .
“El conocimiento sin aplicación práctica se queda a medias. El reto está en que el estudiante salga con competencias que pueda usar desde el primer día en su trabajo”.. Para Ferran la clave está en que la educación online conecta de forma directa al estudiante con las demandas emergentes “El conocimiento sin aplicación práctica se queda a medias. El reto está en que el estudiante salga con competencias que pueda usar desde el primer día en su trabajo”.
Áreas como inteligencia artificial, big data o negocios digitales requieren profesionales con formación sólida y ágil. Universidades como BIU han diseñado programas enfocados en estas tendencias globales, lo que no solo acorta la brecha entre la universidad y la empresa, sino que abre la puerta a oportunidades internacionales. Como concluye Ferran “El gran valor de la educación online es que democratiza el acceso al conocimiento y lo conecta con la realidad; ya no hay barreras de tiempo o espacio para aprender lo que el mercado necesita”.
La educación online es, en definitiva, una respuesta al cambio vertiginoso de la economía global. Y como señalan los expertos de BIU, aprender online no es una alternativa, sino una estrategia imprescindible para quienes buscan competir y destacar en el nuevo mundo laboral.
Acerca de BIU University
El enfoque de aprendizaje en Broward International University (BIU), guiado por un equipo de profesores expertos, combina clases sincrónicas y asincrónicas para ofrecer una experiencia educativa completa. Este enfoque integra una amplia variedad de herramientas dialógicas y de debate, incluyendo foros de discusión, proyectos y tareas tanto grupales como individuales, chats semanales y sesiones regulares de video en tiempo real. Además, se utilizan estudios de casos y aprendizaje basado en proyectos, así como simulaciones.
De este modo, los estudiantes disfrutan de un ecosistema de aprendizaje enriquecedor que les permite interactuar con diferentes formatos y dinámicas del mundo empresarial real. Esta metodología no solo fomenta la colaboración y el pensamiento crítico, sino que también prepara a los alumnos para enfrentar los desafíos del entorno laboral actual.