Palacio Nacional

 

Viendo todas las reacciones que valoran como positivo el anuncio del presidente Luis Abinader del retiro  del Congreso del proyecto de ley de reforma fiscal, recordé uno de los cuentos del libro del  autor nacido en Nueva York, pero de padres libaneses, Gibran Khalil Gibran, titulado ´´El loco´´.

Y es que juristas, iglesias evangélicas, sindicalistas, políticos, empresarios y la sociedad en general se han volcado a los medios de comunicación para señalar que la decisión es sensata, ya que la reforma fiscal impactaría negativamente a los sectores más vulnerables.

La pieza legislativa desde su inicio fue rechazada por todos los sectores, por lo que su retiro del Congreso por parte del mandatario dominicano ha sido aplaudido por la población que ya  solo espera que sea retirada formalmente con la carta del ejecutivo, que según se ha informado que se trabajaba en el documento.

El simil del cuento con esta situación

Estos hechos me hicieron recordar el cuento de Gibran, de apenas página y media, titulado ´´El rey sabio´´, que se desarrolla en la lejana ciudad de Wirani, donde gobernaba un poderoso rey temido por su poder y amado por su sabiduría.

El pueblo se abastecía de agua de un pozo, de aquel todos bebían su agua, incluido el rey y su séquito, pero sucedió que una bruja fue a la ciudad y envenenó aquella agua y echó un ´hechizo´ para que todo el que bebiera de ella quedara loco.

Sucedió que, como es natural, al día siguiente todos bebieron del agua e inmediatamente enloquecieron, los únicos que no bebieron fueron el rey y su primer ministro, por lo que la población comenzó a decir que estaban locos y querían destronarlo.

Aquella noche, el rey mandó a que le llevaran un gran jarra con agua y de ella bebió junto a su primer ministro y ambos se volvieron locos, entonces el pueblo hizo una gran fiesta porque su gobernante y ministro habían recobrado la razón.

La moraleja es que los gobiernos tienen que estar acordes y en consonancia con el sentir de su pueblo, tal como hizo el rey y en nuestro caso, tal como hizo el presidente Abinader.

Por Margarita Brito

Periodista con más de 20 años de experiencia en radio, televisión y prensa escrita. Esposa, madre y abuela. Escribo porque me gusta y porque nada me es ajeno.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *