El cubículo de cristal del segundo nivel de Ágora Mall exhibe hasta el martes 9 de abril las obras de este destacado artista dominicano.
Santo Domingo, abril 2024. “Nuevo mundo” es el título de la XV exposición individual del artista dominicano Cristian Mateo, quien elaboró un excepcional y mágico universo discursivo de carácter medioambientalista.
Su intención con esta muestra es hacer un llamado de atención a los cambios que ha tenido el mundo: “es una invitación a reinventarnos en el contexto que nos ha tocado. Vamos a vivir el presente, no podemos vivir en el pasado y a cuidar en el presente nuestro entorno. Darle la importancia que tiene nuestra naturaleza, lo que hace por nosotros y a la vez lo que podemos hacer por ella. Aún estamos a tiempo”, expresa Mateo.
Por eso, ha creado un ser mitológico, que entre la leyenda y lo real conecta el pasado con el presente, el cocodrilo en su versión Caimán, del Río Haina o del lago Enriquillo. “Quiero apostar a una recuperación de nuestra esencia en este contexto, que sea una muestra que ofrezca un enfoque de nuestros ancestros, de nuestra historia o sea que le den un poco de valor a algo que no vas a encontrar en un libro, que si lo han visto otros como los ingleses… O sea que se cuenten historias y que esas historias se conviertan en ilusión y esa ilusión en una realidad”.
Asimismo, dijo «yo siento que el público dominicano está huérfano de cosas que le conmuevan, que le cambien la vida, la forma de ver las cosas y a la vez de reflexionar sobre lo que está pasando”.
La organización de la muestra está a cargo de un equipo encabezado por el galerista y manager del artista Fausto Brito, Marivell Contreras y Warner Brea con el apoyo de Ágora Mall.
Fausto Brito expresó su satisfacción de poder presentar este pre-opening de esa gran exposición con la propuesta del artista a mediados de año en este espacio.
La periodista y gestora cultural, Marivell Contreras valoró la impronta de Cristian Mateo “no solo por la puesta escénica de una obra deslumbrante, sino por invitarnos a la fiesta mitológica del caimán y los palos de fósforos, aludiendo a la vez a los ancestros y a la flora y la fauna antes y después de la depredación”.