Margarita Brito
La maldad que se está viviendo en el mundo es simplemente horrible. La noche del viernes se produjeron cuatro atentados terroristas en en la capital de Francia, París, que dejaron a las personas alrededor del mundo simplemente horrorizados.
Más de 130 muertos, personas inocentes, cuyo único pecado fue estar en los lugares donde los antisociales del Ejército Islamita decidieron realizar su acto de venganza.
El Papa Francisco ha señalado que «utilizar el nombre de Dios para justificar esta vía es una blasfemia»y afirma que «tanta barbarie nos deja consternados y nos interroga sobre cómo puede el corazón humano idear y cometer actos tan horribles, que han trastornado no solo a Francia sino al mundo entero».
Y esa es la verdad, el mundo cambió y no para bien y mientras miles lloran por los muertos el EI anincia que es sólo el principio de la tormenta. Dios cuánta crueldad!!
Lo cierto es que de seguir esta actitud el mundo se encamina a una gran guerra, ojalá que el Señor ilumine a los líderes políticos para que encuentren un camino hacía la paz y al cese de tanta tantos actos terroristas.