La relación entre la calidad del esperma y el grado de radiación que recibe por parte de los teléfonos móviles es un asunto que ha sido estudiado en multitud de ocasiones. Pero el último trabajo que investiga sobre el tema parece que va a ser el definitivo.
En una informaciòn de Yahoo, da cuenta de “el impacto de los teléfonos móviles en la calidad el esperma”, un estudio realizado por cinco médicos estadounidenses, se analiza otros diez trabajos que se han realizado sobre esta cuestión en busca de la respuesta definitiva. Y el metanálisis da una respuesta muy clara: los teléfonos perjudican afectan seriamente sobre la calidad del semen.
De las casi 1.500 muestras analizadas en esos diez trabajos, el 85% de los espermatozoides de los hombres que no tenían una exposición cercana y continua a teléfonos móviles tenían una movilidad normal para encontrarse con el óvulo y fecundarlo. Pero aquellos que suelen llevar el teléfono en el bolsillo del pantalón tienen esa misma movilidad reducida en un 8%.
El problema se encuentra en la exposición a la radiación de origen electro magnético que emiten los móviles y que nuestro cuerpo absorbe y que daña el ADN de los espermatozoides.
El estudio asegura que aproximadamente un 40% de las parejas del mundo desarrollado que están en edad de procrear sufre de algún tipo de problema de índole reproductora. Y también que la calidad del semen está cayendo de forma acelerada en los países más ricos.
Esta última realidad se lleva constatando desde la década de los años 30. Durante el siglo XX, la calidad y el número de espermatozoides no ha hecho más que reducirse. Factores como la contaminación ambiental, los pesticidas o la dieta -incluso le han llegado a echar la culpa a la soja- pueden ser los culpables de esta realidad.
Y como no, el gran número de tecnología que nos rodea, con sus sus radiaciones electromagnéticas. Y parece que esta vez, con este estudio la cosa parece clara: mejor dejar el móvil encima de la mesa.
