Recife, Brasil. Costa pasó a octavos de final al vencer 1-0 a Italia, que deberá jugarse el segundo boleto a la siguiente ronda contra Uruguay, y de paso, eliminó nada menos que a Inglaterra.
Los centroamericanos hicieron historia en una batalla jugada bajo el sol de 35 grados en Recife e igualaron a la mejor generación de La Sele, que había pasado a octavos de final en Italia 1990 y ahora se aseguran su clasificación una fecha antes.
El gol de Costa Rica fue marcado por una de sus figuras y capitán Bryan Ruiz, de cabeza, tras un excelente pase de Junior Díaz, un minuto antes del cierre del primer tiempo, lapso en el cual el equipo conducido por el colombiano Jorge Luis Pinto mostró grandeza ante Italia, cuatro veces campeón del mundo.
El gran secreto de la ingeniería táctica que presentó Costa Rica fue Christian Bolaños y Junior Díaz, que arrasaron por el sector izquierdo, dejando coja a la defensa italiana.
Bajo el grito ensorcedecor de costarricenses y brasileños que gritaban «Sí, se puede», Costa Rica, un verdadero local en el infierno de calor del estadio Arena Pernambuco.
Durante el primer tiempo, Costa Rica dominó con su línea media y un marcaje escalonado contra Mario Balotelli, que tuvo la mejor oportunidad a los 30 minutos, tras un perfecto pase de Andrea Pirlo que Súper Mario, mano a mano con Keylor Navas, falló al intentar un globo. El portero le detuvo otro remate a los 42.
Costa Rica tuvo opciones de cabeza con Duarte y un remate de Bolaños, que puso en apuros a Gianluigi Buffon.
A los 40, un error garrafal en la defensa italiana, con un fallo de Ignazio Abate, dejó en carrera al gol a Joel Campell, que fue derribado por Giorgio Chiellini, pero el árbitro no lo consideró penalti.
La revancha llegó con el gol de Bryan Ruiz, ante una mala salida de Buffon y a partir de allí Costa Rica comenzó a disfrutar de haber anulado el pase de Pirlo, visiblemente extenuado y el control de De Rossi.
En el segundo tiempo, Campbell fue reemplazado por Ureña pero Costa Rica logró incluso controlar el partido frente a la combinación ofensiva que incluyó el ingreso al ataque de Antonio Cassano.